La joven atleta fue campeona de Europa Sub17 en 2017 en los 400 metros vallas y un año después, tercera en los Juegos Olímpicos Sub18 celebrados en Argentina. Acaba de representar a España (y a Alcorcón) en el Europeo Sub23 de Tallin (Estonia). Estudia Medicina mientras compite por todo el mundo y sueña con los Juegos Olímpicos de París 2024. Carla García, presente y futuro del atletismo mundial en Alcorcón
Cada cuatro años, los Juegos Olímpicos llevan al atletismo a la primera plana mundial. También será así en Tokio 2020, más aún si cabe tras ese año extra de espera por el Covid-19. Y es que cada Olimpiada sirve de escaparate de primera para este deporte, de los más antiguos del planeta y que llega a su máximo nivel en citas como la que se celebra en estos días en Japón. En ellos, hay que recordar, participan cinco rostros de Alcorcón: cuatro deportistas (los gimnastas Roxana Popa y Ray Zapata, y los waterpolistas Álex Bustos y Pili Peña) y el entrenador Miki Oca, seleccionador de la selección femenina de waterpolo. Y en los próximos, sueña con poder hacerlo la atleta Carla García, una de las deportistas con más futuro de nuestra ciudad. Condiciones para hacerlo tiene de sobra, de eso no hay duda.
Y es que la atleta, que cumplirá 20 años el próximo 9 de octubre, es una de las mayores promesas del atletismo nacional… y mundial. Acaba de volver de Tallin, Estonia, donde compitió con la selección española en el Campeonato de Europa de Atletismo Sub23. Acabó sexta en los 400 metros vallas, su gran especialidad, y séptima en los 4×400 por relevos. A nivel individual, además, consiguió su mejor marca personal (56:89), mientras que por equipos batió el récord de España en semifinales y en la final. La joven deportista, con una gran sonrisa en su rostro tras su gran rendimiento en Estonia, visitó la redacción de alcorconhoy.com para repasar su prometedora trayectoria. “Sabía que tenía que ir a Tallin a tope si quería conseguir algo. Llevo una temporada en la que he bajado mi marca personal en todas las carreras. He vuelto muy cansada, pero estoy muy feliz”, cuenta.
Casi dos décadas de servicio al atletismo
Su pasión por el atletismo viene de muy lejos. En concreto, desde que, con ocho años, empezó a competir en las carreras entre colegios que se organizaban en el Parque de las Comunidades de Alcorcón. Carla, que primero estudió en el Amanecer y después, en el Claudio Sánchez Albornoz, ganó tres de seguido. “Y entonces, me dijo mi padre… ‘Oye, pues quizá te apuntemos a atletismo’. Y fue así como empezó todo”, recuerda la deportista, que guarda en su casa y con gran aprecio aquellos títulos.
La joven hizo sus primeros ‘pinitos’ en el Club de Atletismo de Alcorcón. Y fue allí donde conoció a Santiago Díez Rodríguez, que es su entrenador desde hace casi una década. Con él coordinando cada una de sus carreras, todo vino rodado. La deportista alfarera empezó a romper moldes en los Campeonatos de Madrid. Tras ello, siendo cadete, ganó su primera medalla en un Campeonato de España: fue segunda en los 300 metros vallas. Poco después, como juvenil, fue al Campeonato del Mundo de Kenia en los 100 metros vallas. Y dos semanas más tarde, consiguió una de sus mayores hazañas deportivas: el Oro en el Campeonato de Europa Sub17 (el Festival Olímpico de la Juventud) de Hungría, en los 400 metros vallas.
Campeona de Europa… y tercera del mundo
La deportista se había consagrado como una de las grandes promesas del atletismo mundial. Un año después, en 2018, acabó cuarta en el Europeo Sub18 de Hungría, lo que le dio acceso a disputar los Juegos Olímpicos Sub18 de Argentina. En ellos, partía como 12ª por marca… pero terminó tercera y se hizo con la medalla de bronce. “Para mí, ya era un auténtico premio solo el haber ido allí. Ni en mis sueños me imaginaba acabar tercera”, rememora, emocionada. En 2019, con 17 años, fue a su primer Campeonato de Europa Sub20. Hace unos meses, con 19, terminó segunda en el Campeonato de España Absoluto, donde compitió contra las mejores atletas del país y que son mucho más mayores que ella. Y ahora, ha firmado un gran resultado en el Europeo Sub23, donde también se midió a deportistas que la superan con creces en edad.
En cuestión de un año, Carla ha logrado bajar en casi tres segundos su marca personal: de 59,40 a 56,89. “Hice una apuesta con mi entrenador… y la gané. Bajar una sola centésima en atletismo es muchísimo, y puede marcar la diferencia”, reseña la deportista, que ha ganado multitud de campeonatos de Madrid y de España y que hace unos años, fichó por el Playas de Castellón, uno de los mejores clubes de atletismo a nivel nacional. Aunque no tuvo que irse a vivir allí. “El atletismo no funciona como otros deportes en este sentido. Tú tienes un club, pero entrenas donde quieras, y los fines de semana te vas a competir donde sea, aunque con la equipación de tu equipo. Yo sigo entrenando en Santo Domingo, en la misma pista en la que llevo toda mi vida”.
Talento forjado en Alcorcón
Allí, y a las órdenes de su entrenador, trabaja cada día junto a Eliam Fernández, otro de los ilustres atletas de Alcorcón y que se quedó muy cerca este año de competir por ir a los Juegos Olímpicos. “Me encanta entrenar con él, porque hace las sesiones muy amenas y te motiva. La pena que se lesionó y se le truncaron los Juegos, pero volverá más fuerte”, refiere al respecto de su compañero, con el que trabaja en Santo Domingo. Un recinto, por cierto, que necesita de una remodelación urgente. “Llevan mucho tiempo diciéndonos que van a arreglar la pista. Creo que falta un trámite político, pero es que el suelo está fatal. Es más, las chicas han subido este año a División de Honor, la máxima división de España, pero no van a poder competir en Santo Domingo, porque la pista tiene unos agujeros enormes y no está homologada”.
En paralelo a las que se da sobre la pista y con las vallas, Carla tiene otra gran carrera en mente: Medicina, que lleva tres años estudiando en la Universidad Rey Juan Carlos. “De momento, me ha ido genial. Llevo una media muy buena. Y eso que nunca he faltado a un entrenamiento por estudiar. Si te organizas bien, hay tiempo para todo”, cuenta la atleta, que, pese a su juventud, tiene la cabeza bien amueblada y las prioridades muy claras. “Sé que me quiero dedicar todo el tiempo que pueda al atletismo. Pero al tiempo, no puedo descuidar la Medicina. Entonces, si tengo que sacrificar parte de mi vida social, pues lo hago”, cuenta la deportista, experta en auto-organizarse. “El día que descanso es en el que menos cosas hago. Tengo los horarios tan cogidos que, cuando no entreno… me sobran horas”, afirma, entre risas.
París 2024, su gran sueño
La atleta no deja de quemar etapas en su vida. “Cuando era pequeña, recuerdo ver el Campeonato de España Absoluto en la televisión. Y pensaba… ‘Ojalá algún día pueda estar ahí’. Este año, he ido y he quedado segunda”, asegura, con ilusión en su rostro y las metas bien fijadas. “A corto plazo, el año que viene me gustaría ir al Europeo Absoluto y al Campeonato de la Unión Mediterránea. También hay un Mundial Absoluto, pero creo que todavía tendré que esperar un poco más”, señala, con la mente fría. “Y a largo plazo, lo máximo a lo que aspiro es a estar en los Juegos Olímpicos de París 2024. Sería un sueño cumplido”, manifiesta la joven deportista, que, con la humildad por bandera, quiere hacerse un hueco en el atletismo mundial. De momento, ya ha puesto varias piedras.
Fotografía principal: COE
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