La joven fue atropellada por un autobús tras conseguir la medalla de bronce en el Campeonato de Europa Sub18 de jiu-jitsu. Pero se recuperó y, ahora, ha terminado tercera en el Campeonato de España. La gran historia de superación de la alcorconera Raquel Benítez
La vida es, cuanto menos, caprichosa. Tal y como es capaz de dártelo, puede arrebatártelo en apenas unos segundos. Así, le ocurrió a nuestra vecina de Alcorcón, Raquel Benítez, una de los jóvenes talentos del deporte que tenemos en nuestra ciudad y que, recientemente, ha conseguido el tercer puesto en el Campeonato de España de jiu-jitsu.
Aunque el camino para hacerlo no ha sido precisamente de rosas. La joven es un ejemplo de perseverancia y determinación, y ha querido compartir su historia con ‘Primera Plana’, el suplemento del diario MARCA que cuenta historias del deporte que van más allá de todo.
El comienzo de la historia de superación de Raquel se remonta a octubre de 2018. La joven acababa de volver a Alcorcón desde la ciudad italiana de Bolonia, tras haber conseguido la tercera posición en el Campeonato de Europa sub 18 de jiu-jitsu, en modalidad de Dúo Show. La compenetración con su compañera Begoña Reino, tanto dentro como fuera del tatami, fue determinante para sumar una medalla más al maletero español. Así, ambas, vecinas de Alcorcón, regresaron a su vida con las expectativas más altas que nunca. Sin embargo, el destino tenia otros planes.
De cero
Era un día normal en una estudiante de segundo de Bachillerato. Raquel salía del instituto Galileo Galiei de la ciudad, en su hora del recreo como cada día, cruzando por el mismo paso de cebra de siempre. Sin embargo, en esta ocasión, un autobús no vio pasar a la joven y a dos de sus amigas, y se las llevó por delante en el acto. «De repente, sentí como que algo muy grande se me echaba encima con mucha fuerza» declara la joven para MARCA.
La joven fue trasladada de urgencia al Hospital Fundación de Alcorcón. Tras varias pruebas, radiografías, analíticas y ecografías, los médicos diagnosticaron una hemorragia en el bazo. Este órgano se encarga combatir infecciones y mantener el equilibrio entre los líquidos del cuerpo y de proteger otras partes como el hígado. Pero, para suerte de Raquel, su excelente forma física permitió que su cuerpo reabsorbiese la hemorragia, evitando así la perdida de bazo.
Volver a disfrutar
Fueron dos semanas en el hospital y varios meses de reposo para esta enérgica deportista. «Soy muy nerviosa, por lo que era un suplicio tener que estar sin entrenar y sin poder hacer nada. Por ello, el paseo de mi casa al instituto lo disfrutaba una barbaridad. Pero tenía un objetivo: volver a mi deporte, me costase lo que me costase. Es más, las dificultades me hacían tener cada vez más ganas», afirma en sus declaraciones para MARCA.
Meses después del accidente, Raquel volvió a entrenar. De manera lenta y progresiva, pero pudo volver a la que es su pasión desde los 9 años. Sin embargo, se le presentó otra piedra en el camino. La pandemia del Covid-19 lo paró todo. Pero esto no fue suficiente para desechar sus sueños. Y este año, recibió la recompensa a su esfuerzo y sacrificio volviendo a competir en la elite. De nuevo, y junto con Begoña, estas expertas de jiu-jitsu volvieron a conseguir la medalla de bronce, esta vez en el Campeonato de España Absoluto.
Ya como una joven de 20 años, estudiante de Ingeniería Mecánica en la Universidad Politécnica de Madrid, Raquel aprendió a centrarse en el presente. Pero su ilusión siempre estará en volver a un campeonato internacional con la selección española. Y seguro que lo consigue, no hay duda.
Fotografías: Imanol Reino Reñón