El conocido comercio echa el cierre a consecuencia de los cambios en el consumo. Juguetes El Bosque cierra tras toda una vida en Alcorcón
La infancia es una de las etapas de la vida en las que el aprendizaje y el juego son fundamentales. Los juguetes representan para los niños una fuente inagotable de entretenimiento, y para los adultos suponen nostalgia y recuerdo de aquella época. Precisamente, Juguetes El Bosque lleva vendiendo sus productos desde hace varias décadas a los vecinos de Alcorcón. Aunque, tristemente, echarán el cierre en los próximos meses.
La tienda lleva abierta desde hace «muchísimos años» –reconoce Tina, su actual propietaria–. Tantos, que ni lo recuerda. En un primer momento el negocio era de sus suegros, que vendían frutos secos, chucherías y juguetes en general. Pero, cuando llegó a sus manos, Tina, y gracias al consejo de sus hijos, decidió especializarlo en las marcas Playmobil y LEGO, y actualmente cuentan con una gran variedad de divertidos productos que llevan el sello de ambos fabricantes. Incluso venden artículos personalizados, y otros muy singulares que son imposibles de encontrar en otro sitio.
Su pequeño local, ubicado en la Calle Porto Cristo 11, posterior, ha visto el barrio cambiar a lo largo de los años. «Antes había muchísimo ambiente, había tiendas de ropa, lana, una cestería, una copistería… pero, ahora, ya no queda nada. Todo ha cambiado muchísimo», manifiesta Tina a alcorconhoy.com.
Los efectos de la pandemia
Uno de los negocios que resistió el choque de la pandemia fue esta singular juguetería. Ellos seguían trabajando durante el confinamiento y enviando pedidos a domicilio. Lamentablemente, el efecto del coronavirus y los cambios en los hábitos de consumo han sido demasiado duros para esta pequeña tienda de barrio, que cerrará sus puertas próximamente. «Lo de Amazon y ese tipo de compañías ya se venía viendo. Lo que pasa es que con la pandemia fue definitivo», afirma Tina, al respecto del comercio online. Una losa que, finalmente, ha sido casi imposible salvar.
En los últimos años, los compradores se han familiarizado con las compras por Internet y han abandonado el comercio tradicional, según muestran la mayoría de estudios. «La gente prefiere salir del trabajo, llegar a casa, coger el móvil y pedir lo que quieran. Tenemos página web, pero no nos anunciamos y esa es la diferencia. Ellos pagan unos anuncios en televisión, en radio y todos los conocen. A nosotros nos conoce la gente nuestra, nuestros clientes habituales», nos cuenta Tina. «Los métodos de venta han cambiado y hay que asumirlo, no te queda otra. A mí me encanta mi trabajo y es una pena… pero no puede ser».
La ilusión de los niños no se pierde
A pesar de todo, la dueña no duda ni un instante sobre los beneficios de comprar en una tienda local respecto a hacerlo a través de un ordenador: «Para mi hay mucha diferencia entre comprar en una tienda y por Internet. Pero yo no lo tengo que ver, lo tiene que ver la clientela. Pero para mí, esto es mejor, porque aquí ves que tiene la caja, las etiquetas, ves el tamaño… o puedes preguntar si un juguete es adecuado para un niño de 2 ó 4 años. Yo les puedo orientar porque para eso estoy. Y en Internet no es así», reseña la propietaria.
Aunque una cosa está clara: los más pequeños no han perdido la ilusión por los juguetes. «Aquí vienen niños con sus padres o abuelos y todo les gusta, todo lo quieren. Los niños no se ocupan de cómo lo compran o dónde, ellos pasan de eso, no piensan en el comercio ni en el online como es normal, son niños. El caso es tener su juguete”, señala Tina.
En liquidación
El negocio llevaba arrastrando problemas económicos desde la pandemia. Sin embargo, las últimas navidades fueron un momento decisivo. «Nos dimos un margen de la campaña de Navidad. Y no ha ido bien. Ha ido, pero nada que ver con cómo eran las Navidades antes de la pandemia. A mí me gusta la tienda, me gusta los productos que tengo y me gusta el trato con la gente. Pero con eso no basta», nos cuenta Tina. «Siempre se vende algo, pero no lo suficiente como mantener un negocio. Hay que seguir comprando y, si no tienes todos los productos actuales, no haces nada».
Muchos vecinos de Alcorcón se han sorprendido y lamentado por el cierre de una tienda de toda la vida, según nos cuenta la dueña. «La gente cuando ve el cartel de ‘SE CIERRA’ se sorprende y piensa qué cómo puede ser. Sin embargo, en el día a día no se dan cuenta de la de horas que se le dedica a un comercio así y lo duro que es. Cuando ven el cartel es cuando lo sienten, pero ya es tarde», manifiesta la propietaria.
Juguetes El Bosque se encuentra actualmente en liquidación de productos, con la mayoría de su catálogo rebajado con descuentos de hasta un 20%. El local se encuentra en la Calle Porto Cristo, 11 (Posterior) en Alcorcón. Se encuentran abiertos mañanas y tardes y también disponen de venta por internet a través de su página web: https://jugueteselbosque.com.
Fotografía principal: Joaquín Parejo Blanco
Resto de fotografías: Juguetes El Bosque
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