Desde mi Colmena en Alcorcón: Vergüenza de género

Desde mi Colmena en Alcorcón: Vergüenza de género

Nueva columna semanal sobre impostoras que se infiltran entre las feministas. Desde mi Colmena en Alcorcón: Vergüenza de género

Sí, vergüenza. Porque no sólo me afecta la violencia de género. La vergüenza que me produce el abuso que algunas tipejas hacen de su contemplación legal, me revuelve entera.

Son impostoras que no han experimentado la violencia de género en su vida, pero se suben al carro con su patraña para castigar al causante de su despecho con ocasión de un rechazo sentimental, un divorcio no deseado, etcétera.

Su farsa deja en evidencia a las víctimas reales que sí necesitan la aplicación de las leyes, prevención y medidas contra el maltrato de género; desvirtúan el proyecto entero, provocan un desperdicio de recursos y alimentan así ―entre los trogloditas machistas que para colmo crecen en número por su culpa― la leyenda de las denuncias falsas con que muchos esgrimen la negación de la violencia de género.

Son mujeres que profanan la manifestación del 8 de marzo con su farisea presencia. Algunas incluso ejercen secretamente una violencia económica sobre parejas con ingresos inferiores a los suyos ―o sin ingresos propios― y sacan a pasear entre la muchedumbre un delirio de grandeza que no es sino la búsqueda de consuelo a su resentimiento contra sus propios complejos y frustraciones, adoctrinando a sus propias hijas en una superioridad de facto y un supuesto derecho a reivindicarlo sobre los hombres con una vengativa pataleta cargada de discriminación sexual. No son feministas (=igualistas); son simples resentidas y son un cáncer para la idea de igualdad y paz que buscamos con nuestros compañeros.

Son el tipo de mujeres que seguramente sí han dado con el tipo de compañero sensible y responsable, soñado como pareja y padre por tantas otras desde la honestidad y la paz.

En su redil, este hombre ha terminado convertido en margaritas para los cerdos o mejor dicho: para la cerda. Ésta reduce su dimensión y dignidad humana con mentiras, manipulación, poder económico y lo que es peor: el temor del padre a perder a sus hijos. Lo someten así a una vida de resignación y subyugación constantes entre innumerables y variadas amenazas y vejaciones, inconfesables éstas porque, para colmo, de ellos sí se puede reír la sociedad como de un monstruo de circo (un blandengue, “un amariconao”, calzonazos…), cuando confiesen la humillación vivida.

Se infiltran y embarran la manifestación con su hipocresía y su odio, intoxicando el clamor feminista con sus falsas voces; disimulando ante las demás que la misma prepotencia machista que fingen linchar la están ejerciendo ellas y que en casa se ha quedado su víctima amordazada.

Trabajo en un bufete donde me he topado con más de un hombre aterrorizado porque su mujer lo amenaza, en voz baja y con disimulo: “Ya verás, te voy a sacar los dos pisos; no te voy a dejar  ni el patinete para moverte”. Te lo cuentan con la voz temblorosa a punto de quebrar en llanto mientras sientes que están sudando frío. Aun así, las amenazas anteriores no son nada comparado con algo mucho peor:

“No vuelves a ver a los niños”.

Finalmente, a este horror se me ha sumado la vergüenza de género elevada al máximo exponente, cuando ellas mismas ―según he ido hablando con unas y otras― se han jactado en mi cara de sus hazañas vengativas.

―Tres maridos he tenido―me decía una. Celebraba, como una cazadora de osos, cómo los había despellejado a todos uno tras otro, por puro afán de venganza y cierta importación cultural de comportamientos ausentes de un mínimo respeto y muy cargados de codicia.

Vergüenza de género. De ese género de mujeres transformadas en el mismo tipo de verdugo que denunciamos el 8 de marzo.

Patricia Vallecillo – escritora.

Blog: https://erase-una-vez-entre-otras-cosas.webnode.es/blog/

Autora de la trilogía Las abejas de Malia y del cuento Letras para una bruja.

web: https://las-abejas-de-malia2.webnode.es/

Facebook: Las Abejas de Malia libro

Instagram: escritorapatriciavallecillo

*Queda terminantemente prohibido el uso o distribución sin previo consentimiento del texto o las imágenes propias de este artículo.

Sigue al minuto todas las noticias de Alcorcón. Suscríbete gratis al
Canal de Telegram
Canal de Whatsapp

Sigue toda la actualidad de Alcorcón en alcorconhoy.com