El alcorconero Rafael Serrano es a sus 36 años uno de los árbitros más contrastados del baloncesto español. Alcorcón vive la ACB desde el arbitraje.
En muchas ocasiones hablamos de goles, jugadas, resultados, canastas, carreras, puntos… El deporte nos apasiona en Alcorcón y también en alcorconhoy.com. Pero muchas veces nos olvidamos, o solo nos acordamos para mal, de unos protagonistas indispensables para el buen desarrollo de la competición. Hablamos de los árbitros. Así que para alcorconhoy.com es un lujo charlar de arbitraje con un alcorconero que lleva muchos años ejerciendo de la mejor manera esta labor y que se encuentra en la élite europea del arbitraje de baloncesto. Hablamos de Rafael Serrano quien a sus 36 años lleva 8 temporadas en la ACB y suma casi 200 encuentros en el máximo nivel. Alcorcón vive la ACB desde el arbitraje.
- ¿Cuándo empezaste con el arbitraje?
A los 17 años. Yo siempre había jugado al baloncesto en el Alcorcón. Era mi segundo año de junior. Entrenaba con el Nacional e hice el curso de arbitro. Me llamaba la atención, quería seguir enganchado pero no tenía previsto tomármelo muy en serio para ser árbitro. El primer año compaginaba el arbitraje en las escuelas hasta cadete con mi faceta de jugador. Después de un año compaginándolo… me enganchaba más el arbitraje y me quede de árbitro.
- En 2007 ya llegas a EBA
Sí así es. Estuve con las categorías inferiores de la Federación Madrileña y en 2007 hice el ascenso a Liga EBA.
- ¿En qué momento te das cuenta de que puedes llegar a la élite?
Yo era un árbitro joven… Me fueron dando confianza, fui a varios campeonatos de España llegando hasta semifinales y demás. Vas haciendo un camino. Poniendote objetivos a corto plazo e intentando que tus informes y tus actuaciones sean buenas. Pero si te soy sincero… no hubo un momento en el que dije voy a llegar seguro a ACB o estoy en el camino que desemboca seguro en esto.
- Supercopa Femenina, Copa Adecco Plata, LEB…
En LEB estuve cuatro años. Fueron años de mucho aprendizaje y de hacerme como árbitro y como persona. Tengo un gran recuerdo de la LEB. Hay muchos equipos profesionales. Te inicias en el baloncesto profesional y le tienes que dedicar muchas de preparación en todos los ámbitos. Para mí fue una etapa de desarrollo muy importante.
Hasta los gatos quieren zapatos
Serrano es, además de árbitro, zapatero. Y es que este árbitro alcorconero trabaja en Zapatos Castellano una histórica empresa zapatera con un siglo de historia. Un árbitro en ACB puede arbitrar hasta los 55 años así que con 36 años de edad parece que le quedan muchos partidos que arbitrar en las canchas españolas.
- Asciendes en 2013 a la ACB ¿Te lo esperabas? ¿Habías sonado?
No la verdad. Es verdad que yo cumplía un poco el perfil que busca la ACB. Es verdad que había arbitrado playoff de LEB ORO… Pero no me lo planteaba porque el nivel es muy exigente… No tiene nada que ver con otras competiciones. Entonces no me lo planteaba como algo que fuera a ser inmediato o tuviera que pasar sí o sí.
- ¿Cuál fue tu primer partido ACB y cuántos llevas?
Llevaré cerca de 200 yo creo aunque si te soy sincero no llevo la cuenta. Y el primero fue muy especial… ¡Imagínate! Fue un Bilbao Basket – Cai Zaragoza. Fue una experiencia maravilloso. De lo más bonito que he vivido. Nunca te atreves ni a soñarlo. La cantidad de veces que yo veía los partidos en la tele e intentaba aprender y ahora estaba yo ahí.
- ¿Qué es lo mejor de ser arbitro ACB?
Pues lo mejor vivir en primera persona el baloncesto de élite con los mejores jugadores de España y Europa. La ACB es una competición extraordinariamente profesional y especialmente innovadora. El nivel es altísimo en todos los niveles y eso lo podemos comprobar en el papel de los equipos españoles en Europa o el gran nivel general del baloncesto español. Es un privilegio ser árbitro ACB y formar parte de la ACB.
- ¿Lo menos bueno?
Pues quizá el tiempo que le quitas a la familia. Yo tengo dos niñas que son lo mejor de mi vida y es verdad que el arbitraje profesional te exige mucho nivel requiere mucha exigencia, entrenamientos, formación, viajes… El tiempo que le quitas a la familia.
- ¿Qué te dijeron tus padres cuándo te metiste al curso de árbitro?
Mi madre me sigue diciendo que si hoy se tiene que meter en la ducha o no (risas) La verdad es que se van dando pasos y poco a poco se va valorando más al árbitro y su trabajo. Pero claro… nosotros no tenemos una afición detrás. Unas veces se acuerdan de tu madre y otras de tu padre. No debería ser así pero lo asumimos.
Los primeros años quizá lo llevas un poco peor y existen malas experiencias con padres en la grada con protestas e insultos pero cuando llevas mucho tiempo no te afecta. Lo asumes. Se están tomando medidas para hacer ver que nuestra labor es la de un deportista más que acierta o se equivoca como cualquier persona.
Presión
- ¿Qué partido te ha hecho especial ilusión?
He ido a dos Copas del Rey en 2019 y 2020. Hice también un partido de final de Liga… Son partidos muy ilusionantes. Además cuando llegas a esos partidos es una valoración a nuestro trabajo y un premio al trabajo realizado.
- ¿Cómo trabajas o gestionas esos partidos de tanta presión?
Aunque te sorprenda, intentando no pensar en ello. El juego es el mismo: cinco contra cinco, un balón y dos canastas. Es baloncesto. Quieres trabajar bien y anticiparte y no darle vueltas a ninguna decisión porque pierdes la concentración durante el partido. Eres consciente de la repercusión deportiva pero no puedes pensar en ello.
- ¿Cuáles son las cualidades que hacen falta para llegar a la ACB?
Los primero ser buena persona. También es importante saber leer el juego, es decir experiencia previa. No es imprescindible haber sido jugador o entrenador, pero te ayuda a poder anticipar acciones, reacciones y comportamientos. También conocer y entender las emociones los integrantes del juego. Tener mucha empatía y ponerte en la piel del jugador y entrenador. La última para mí, capacidad de autocrítica. Bueno.. además de la parte física.
Nueva normalidad
El COVID19 también ha llegado al baloncesto y las competición se han tenido que adaptar a la nueva normalidad.
- ¿Qué protocolos os rigen?
Tuvimos una fase previa que fue la fase final de Valencia. Allí estábamos en plan formato burbuja con análisis de sangre o PCR cada dos por tres. Ahora nos hacen pruebas PCR cada 48 o 72 horas antes de los partidos. En uno de esos PCR yo di positivo y tuve que hacer cuarentena en casa.
- ¿Cuál es el nivel del arbitraje madrileño?
Siempre ha sido un arbitraje muy reconocido. En la Comunidad de Madrid tenemos la fortuna de contar con muchos equipos y eso propicia también el acceso a muchos partidos, a formación, experiencia… Te hacen mejorar esa cantidad de equipos y de buenos equipos cada día.
Ahora somos una generación muy joven. Yo soy el más veteranos con 36 años.
Alcorcón
Rafael Serrano lleva toda la vida en Alcorcón. Vive en la zona de Los Castillos. Ahora el partido que más le gusta ver es cuando su hija mayor empieza a botar la pelota naranja. Esposo de Gabriela y padre de dos niñas, Clara y Julia, de dos y cuatro años nos contaba sus inicios en el baloncesto.
- ¿Cuándo empezaste con el basket?
Pues en torno a los ocho años. Mi hermano mayor, Abraham, ya jugaba y yo empecé a jugar en Los Cantos. También he jugado en La Canaleja… Desde pequeño he tenido cerca el balón de baloncesto y toda la infancia y adolescencia he jugado.
Ahora mi hermano y yo hablamos mucho de baloncesto y él bromea si me equivoco en un partido. Nos apasiona este deporte.
Alcorcón vive la ACB desde el arbitraje.
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